¿Como averiguáis la edad y características del objeto que habéis encontrado?
Hay dos formas de investigar la antigüedad de un objeto encontrado en un yacimiento: aplicando métodos que permitan datar directamente el objeto y aplicando métodos indirectos que permitan conocer la antigüedad del sedimento en el que han aparecido, o calcular la edad a partir de otros objetos que aparezcan junto a él y que conozcamos su antigüedad.
En el primer caso, los métodos de datación directa generalmente son destructivos, y a los paleontólogos nos supone un dilema el dejar que se destruya el fósil, aunque solo sea una pequeña parte de él. Por eso normalmente se datan fragmentos pequeños, no significativos, o rocas asociadas al lugar donde aparecieron enterrados. El método más conocido de este tipo es el del Carbono-14, pero esta técnica solo permite conocer la edad de objetos que tengan como máximo 40.000 años.
En Atapuerca, que tiene yacimientos mucho más antiguos, se utiliza un método para conocer la edad de las costras de carbonato (como las estalagtitas y las estalagmitas) que mide la proporción de unos elementos radiactivos llamados Uranio y Thorio. Gracias a este método podemos datar costras estalagmíticas que se formaron hace medio millón de años sobre los fósiles.
En Atapuerca también utilizamos la bioestratigrafía (= diferenciar y ordenar capas -estratos- por su antigüedad, según el contenido de especies de seres vivos que tiene cada capa) de los micromamíferos (= pequeños mamíferos, sobre todo roedores pero también pequeños carnívoros). Este método es bastante preciso y muy útil para estudiar yacimientos tan antiguos. Consiste en conocer qué especies de pequeños ratoncitos, lirones, musarañas vivieron en cada momento. Como cada conjunto de micromamíferos es distinto del anterior y del siguiente, podemos saber en qué periodo de tiempo concreto de la historia de la Tierra estamos, según los fósiles de micromamíferos que contengan. De forma que estudiando los cientos de huesecitos de estas especies que aparecen en los yacimientos, podemos conocer a qué momento concreto de la historia de la Tierra pertenece la capa de tierra que estamos excavando.
¿Qué te condujo a estudiar o a ser arqueóloga? Y quien te animó a ser arqueóloga? ¿Es difícil la carrera ?
Desde muy pequeña me gustaba mucho la Naturaleza y salir al campo, y los animales de la Prehistoria me fascinaban.
En mi caso particular soy Paleontóloga, no arqueóloga. En muchos yacimientos los paleontólog@s y arqueólog@s trabajamos juntos, pero hemos estudiado cosas muy diferentes porque nos interesan cosas diferentes. A un paleontólog@ le interesa conocer los fósiles desde el punto de vista de la Historia de la Vida, estudiamos Seres Vivos del pasado: cómo eran, su anatomía, su tamaño, a qué edad murió, qué le ocurrió y por qué murió. Un arqueólogo se pregunta sobre las acciones humanas, sobre la mente humana: mis compañeros trabajan sobre los objetos que fabricaron, se preguntan sobre los animales que se comieron, sobre los lugares donde estuvieron.
La carrera que yo estudié es Biología, especialidad de Zoología y Antropología Física, y luego hice el doctorado en Paleontología. En mi opinión, todas las carreras cuestan un esfuerzo, pero si te gusta mucho, al menos alguna asignatura, merece mucho la pena y se te olvidan los ratos malos y aburridos.
¿Qué asignatura fue la más difícil y cual fue tu peor momento como estudiante?
En mi opinión, la asignatura más difícil es de la que sabes menos antes de empezar, y no tienes un buen profesor que te ayude a entenderla. La que más me costó fue una de la carrera llamada “Regulación del metabolismo”, relacionada con Bioquímica. Era muy complicada y con muchísima información que yo no dominaba.
El peor momento como estudiante fue decidir lo que realmente quería estudiar, y no lo que creía que me convenía para el futuro. Al final, creo que he aprendido que casi cualquier cosa que se decida estudiar, es fácil de hacer y emocionante si se hace porque uno quiere, con gusto, aunque nos lleve mucho tiempo.
¿Qué hueso u objeto es el más viejo que habéis encontrado?
Mis compañeros de Atapuerca que trabajan en el yacimiento de Trinchera Elefante han encontrado los huesos del homínido más antiguo hallado en Europa, de hace 1,200.000 años. Se trata de una mandíbula con algunos dientes, algunos muy rotos, y una falange de la mano. Aún no sabemos a qué especie de homínido perteneció, pero sí sabemos que es de nuestro mismo género, el género Homo. Tenía la boca llena de infecciones, creemos que porque tenía problemas al masticar, y que debía usar los dientes muchísimo más de lo que los usamos nosotros ahora.
¿Cuál fue el hallazgo más importante?
En los yacimientos de Atapuerca se han encontrado fósiles de tres humanidades muy diferentes, en tres yacimientos diferentes. Esto ha sido un golpe de suerte increíble. Los restos de homínidos de la Gran dolina son diferentes a todos los demás del planeta: por eso les pusimos un nuevo nombre: Homo antecessor.
¿Cómo es el trabajo en equipo en Atapuerca?
Hoy en día durante la excavación trabajamos más de 150 personas: ¡no tenemos tiempo de conocernos todos! Es un trabajo muy intenso: nos levantamos muy temprano, cada uno va a su yacimiento a trabajar, comemos tarde, a las 4:30, y por la tarde trabajamos en el laboratorio apuntando toda la información que hemos anotado por la mañana. También lavamos y restauramos los fósiles, hasta la hora de la cena. Es un trabajo muy satisfactorio porque conoces a gente de muy diversas carreras y de muchos países. Todos aprendemos mucho de todos. Por supuesto, por la noche nos queda un rato para divertirnos y charlar.
¿Eras buen estudiante?
Fui una estudiante “tirando a buena” durante la Primaria, Secundaria, y Bachillerato, y tuve que esforzarme mucho durante la carrera.
¿Cómo son los pasos en la investigación un yacimiento ? ¿Es duro el trabajo ?
Para investigar un yacimiento lo primero que hay que hacer es planificar la excavación, y estar seguro de que después habrá tiempo de estudiar lo que se ha excavado y presentar los resultados a la comunidad científica. almacenar los restos en un Museo es una pena. Es un trabajo duro pero muy satisfactorio, tanto la excavación como luego el trabajo de despacho y laboratorio.
¿Quién le puso el nombre de Atapuerca?
Se conocen como los yacimientos de Atapuerca porque las cuevas donde se han descubierto todos los fósiles están “dentro” de la montaña que lleva ese nombre, la Sierra de Atapuerca.
¿Cómo es el yacimiento?
No hay un yacimiento, hay muchísimos. Algunos los excavamos al aire libre, porque aparecieron cuando la Sierra fue cortada para construir la trinchera por la que pasó un ferrocarril. Otros están dentro de cuevas como las imaginamos ahora, como el yacimiento de la Sima de los Huesos, El Mirador, El Portalón de Cueva Mayor o la Galería de las Estatuas.
¿Quien es Juan Luis Arsuaga?
Es uno de los tres codirectores de las excavaciones de Atapuerca, junto a José María Bermúdez de Castro y Eudald Carbonell. Además es mi Maestro, y me dirigió la Tesis Doctoral.
¿Cómo se forman las capas?
Las capas o estratos se van formando porque queda la tierra (sedimentos) que llevaba el agua cuando recorría las galerías y las cuevas. Cuanto más profunda está una capa, más antigua será, porque las siguientes se irán formando por la arcilla que, poco a poco, se va quedando acumulada sobre la anterior. De modo que, si no ha pasado nada extraño, siempre sabremos que los fósiles que están más profundos (más abajo) son más antiguos que los que están más cerca del techo de la cueva.
¿Cuál fue la primer yacimiento donde trabajaste?
Empecé desde el principio a trabajar en La Sima de los Huesos de Atapuerca, a la que se llega andando dentro de la Cueva Mayor más de medio kilómetro, y después de pasar una gatera muy estrecha. Después de pasar la gran sala de los Cíclopes, tenemos que bajar por una sima (un tubo de roca) de 13 metros, ayudados con cuerdas de espeleología. Al fondo de ese foso, esta el yacimiento de la Sima de los Huesos, que es muy pequeño.
También he excavado en otros yacimientos de Atapuerca (como La Galería, La Gran Dolina, El Penal, Estatuas) y en otro en el que se ha hallado una mandíbula Neandertal, que también está en la provincia de Burgos: Valdegoba. .
¿Viajas mucho? ¿Dónde? Viajar forma parte de nuestro trabajo, porque vamos a estudiar los fósiles a los museos del mundo donde están guardados. He ido a ver los fósiles de Francia, Alemania, Sudáfrica, Croacia, Grecia… También por nuestro trabajo vamos a congresos y reuniones científicas. Este año he tenido la suerte de estar en varios países como México, China, EEUU, Alemania, Chequia, y no sé si me olvido de alguno. Además viajamos mucho por España, también por reuniones científicas o trabajo, por ejemplo viajo mucho a Burgos y a Tarragona. Yo vivo en Madrid y trabajo en la Universidad de Alcalá de Henares.
¿Como descubriste que Benjamina tenia una parálisis psicomotora?
Lo que descubrimos de Benjamina es que tiene una enfermedad muy rara, que consiste en que los huesos del cráneo se le soldaron antes de tiempo. Eso puede producir daños en el cerebro, por eso a los niños que les pasa hoy en día se les opera enseguida. En el caso de Benjamina además vimos que su cerebrito parece tener anomalías, que podrían estar asociadas a otras complicaciones más graves. Pero no creemos que tuviera una parálisis, creemos que necesitaría cuidados especiales de su familia y de su gente, que es diferente.
He dado muchas charlas en muchos colegios e institutos, pero preguntas por escrito, para hacer un trabajo, solo me lo han pedido una vez, un alumno de 1º de la ESO, amigo de uno de mis hijos.
La Sima de los Huesos donde excavo yo está a 42 metros de profundidad. Hemos tenido que aprender a hacer espeleología, y tener mucho cuidado. El pero momento quizás fue cuando mi compañero José Miguel Carretero se rompió la pierna dentro de la cueva, y no estabamos seguros de poder sacarlo a través de una gatera muy estrecha que hay que atravesar para poder salir. Pero todo salió bien.